Hasta ahora, la tradición marcaba que la celebración de la Primera Comunión supusiera un despliegue de medios que, en muchos casos, suponía un desembolso económico de gran calado para las familias. En la actualidad, las comuniones low cost marcan tendencia.

Ahorrar en la primera comunión se ha convertido en una obligación para muchos hogares azotados por la crisis económica. Si al principio esta cuestión agobió a muchos padres y apenaba a los familiares; lo cierto es que, con el tiempo, las comuniones low cost han llegado a ser tendencia.

Ahora se lleva eso de desplegar la imaginación para que uno de esos días tan especiales en la vida de tus hijos, pueda ser inolvidable sin necesidad de realizar un enorme agujero en tu bolsillo.

La tendencia DIY (Do It Yourself – hazlo por ti mismo) se ha convertido en una moda y además ha sacado lo mejor de nosotros mismos, para conseguir ambientes y fiestas de Primera Comunión llenas de imaginación y calidad.

En relación con el traje de comunión de los pequeños, los padres se decantan por dos opciones. La primera de ellas, empleada también en las bodas, es la de alquilar el vestido, ahorrando dinero en una prenda que, probablemente, solo iba a tener un uso. Por otro lado, también existe la opción de acudir al altar con una indumentaria elegante pero sencilla, con prendas que luego puedan ser aprovechadas en la vida diaria.

Las tarjetas de la Primera Comunión, quedan ideales con un poco de imaginación y unos cuantos elementos propios de las manualidades. Dispondrás de tarjetas preciosas y muy vistosas hechas a mano.

A la hora de las celebraciones, posteriores a la ceremonia religiosa, los padres han sabido dar un giro a la tradición. Atrás quedaron esos súper banquetes, más propios de un enlace matrimonial que del acercamiento del niño a la religión cristiana.

En este sentido, se ha puesto de moda contratar sencillos servicios de cáterin, generalmente tipo buffet, donde cada uno se sirve lo que desea de una única mesa de aperitivos, snacks, dulces y alimentos ligeros. La otra opción es realizar una celebración más íntima, para familiares y allegados más cercanos.

En el momento de ofrecer un recordatorio a quienes han asistido a la Primera Comunión de tu hijo, se vuelve a imponer la tendencia del ‘Hazlo tú mismo’. En Internet encontrarás miles de páginas en las que te enseñarán a confeccionar preciosos y sencillos recordatorios hechos a mano, que te harán quedar muy bien por muy poco dinero. Además, con esta solución también puedes permitir que el homenajeado, tu hijo, también participe en la tarea de confeccionar los recuerdos para los amigos y familiares.

Por último, no debes olvidar que para cualquier tipo de improviso, como puede ser la organización de la fiesta de Primera Comunión de tu hijo, siempre puedes contar con una inyección de dinero extra gracias a los créditos rápidos sin papeleos de Viaconto.