Existen modalidades de trabajo a las que les viene muy bien cualquier acción que les ayude en su economía. Habitualmente oímos hablar de créditos para autónomos, préstamos para empresas, préstamos para emprendedores… la situación económica empuja a pedir ayuda.

Sin embargo, existen otras fórmulas que conllevan sus beneficios fiscales para empresarios y autónomos y también comportan un ahorro en la nómina del trabajador. Nos referimos a los ahorros que puede conllevar el uso de un ticket restaurante.

Los cambios legales en los vales de comida

Un ejemplo significativo, para empresas y trabajadores que aprovechan las ventajas de los tickets de comida, son los cambios que se han producido en la ley y que ha incorporado beneficios desde primeros de enero de 2018.

Se trata de la exención del IRPF, que ha aumentado en 2 euros al día. De este modo, a través del Real Decreto 1074/2017, “Se eleva la cuantía diaria exenta de las fórmulas indirectas de prestación del servicio de comedor, esto es, los vales comida o documentos similares, tarjetas o cualquier otro medio electrónico de pago que se entregan al trabajador para atender dicha necesidad”.

En la práctica esto supone que la cantidad diaria exenta se ve aumentada de los 9 euros, estipulados ante de la modificación legal, a los 11 euros diarios actuales. Esto significa que un trabajador que desarrolle su labor veinte días al mes, durante once meses al año, conseguirá ahorrar fiscalmente, gracias a la exención en el IRPF de 2.420€ anuales. Hasta ahora esa cantidad era de 1.980€, lo que significa que aumenta el poder adquisitivo unos 600€/año.

Cómo se benefician la empresa y los autónomos

Las empresas tienen la obligación de reflejar en la nómina de los trabajadores las cantidades que les ofrecen como beneficios sociales. Entre ellas podríamos hablar del transporte, la guardería o las propias ayudas para comida). Esas cantidades deben cotizar a la Seguridad Social, si bien están en exención de IRPF para los trabajadores, hasta el máximo de los 11€/día.

En el caso de las empresas, la cantidad se deduce íntegramente en el Impuesto de Sociedades. Además, presenta el beneficio de la factura única, lo que hace más fácil (e incluso elimina) los gastos administrativos derivados de gestionar las cantidades destinadas a comida.

Es una medida estrella, porque se ha demostrado que es una de las bonificaciones que resultan más motivadoras para los empleados. De este modo se les está permitiendo una opción que valoran muy positivamente.

En el caso de los autónomos, también pueden gestionar y controlar mejor sus gastos de comida, gracias a la factura única. En el apartado de la fiscalidad, deben tener en cuenta guardar las facturas o documentos del pago de la comida, ya que en cualquier momento pueden ser reclamados por Hacienda aquellas cantidades satisfechas con vales de comida.

No pueden olvidar contabilizarlos e imputarlos en el ejercicio al que correspondan.