Los repos son operaciones entre entidades financieras e inversores particulares en las que la entidad vende al particular un determinado activo financiero con la promesa de recomprárselo posteriormente en un plazo concreto y a un precio inicialmente pactado. Este tipo de operaciones se realiza, por lo general, con activos de deuda pública en donde los tipos de interés a los que cotice esta serán claves a la hora de determinar el tipo de interés que la entidad pagará al particular en la recompra. Aunque los repos puedan parecer complicados activos financieros, en realidad son bastante simples. Su funcionamiento es similar a un préstamo tomado en una casa de empeño. Cuando vamos a la casa de empeño lo que hacemos es darle una joya u objeto de valor el cual podremos recuperar si devolvemos el importe prestado más un interés rápidamente. Los repos son lo mismo solo que en este caso el particular es la casa de empeño, el banco es quien acude a pedir dinero a la casa de empeño y lo que se queda en prenda como objeto de valor es el título de deuda.
Los repos son instrumentos que les permiten a los bancos obtener liquidez por parte de los particulares o incluso de parte de los bancos centrales. En estos últimos los repos no suelen durar más de 24 horas y se les conoce como overnight repos. El interés que abone el banco por un repo será mayor cuanto mayor sea el plazo de duración de este, y menor cuanto mayor sea la calidad crediticia del título de deuda pública que se intercambie.
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