SECRETO BANCARIO

El secreto bancario es el derecho o facultad otorgado a entidades financieras para no desvelar los datos acerca de los clientes que contratan sus servicios, aun cuando sean los propios estados o administraciones públicas quienes soliciten tal información. El secreto Bancario tiene tanto defensores como detractores. Entre los primeros, la principal argumentación que se hace es que, si no existiera este derecho, cualquier persona podría acceder a información privada de vital importancia para sus clientes como sus movimientos de cuenta. De ahí que los partidarios del secreto bancario equiparen la necesidad de este derecho casi al mismo nivel que los profesionales médicos, que consideran imprescindible la confidencialidad con sus pacientes. Entre sus detractores, señalan que el secreto bancario es muchas veces coartado por movimientos de dinero dentro del mercado negro y el crimen organizado y es un instrumento de ayuda para que los grandes patrimonios evadan pagar ante el fisco los impuestos que les corresponderían.

Sea como fuere, lo cierto es que paulatinamente los detractores se han ido imponiendo a los partidarios y cada vez son más los países que renuncian al secreto bancario y participan de acuerdos de intercambio automático de información financiera. Bien es cierto que muchos de estos países solo permiten esos intercambios de información con fines fiscales para evitar la evasión tributaria de las grandes fortunas. Entre los países que han quitado el secreto bancario se encuentran Uruguay, Guatemala, Suiza, Andorra u Honduras.