8 consejos para ahorrar en luz este invierno

El 20% de la energía que consumimos en nuestro país se gasta en nuestros hogares. La calefacción supone casi la mitad de dicho consumo, tal y como confirma la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU). Por ello es tan importante saber qué medidas se pueden llevar a cabo para reducir el consumo de energía sin que se vea afectado por ello el confort de nuestros hogares. Se trata de ser constantes en el día a día y crear nuevos hábitos que no sólo reducen el importe de nuestras facturas de luz y gas, sino que contribuyen a la mejora del medio ambiente.

1. Aprovecha el calor del sol:

El sol que entra por la ventana nos calienta como la calefacción. Saber cuándo abrir y cerrar persianas ayuda a calentar la casa de forma natural y, por tanto, te permite ahorrar en la factura de la luz. Recuerda abrir por la mañana las cortinas y persianas. Durante la noche, ciérralas y evitarás así la pérdida de calor.

2. Evita el consumo fantasma:

Recuerda encender únicamente los electrodomésticos que vayas a utilizar en el momento. Tener en modo stand by los aparatos que no estamos utilizando supone el 10% de la electricidad que gastamos en casa.

3. Temperatura estable:

Es preferible mantener una temperatura moderada (entre 19º y 21º) estable a lo largo del día, que estar subiendo y bajando la calefacción cada rato, pues estos golpes de calor incrementan la factura de gas de forma considerable. Además, es importante vestir ropa adecuada a cada periodo del año. Si usas prendas ligeras en invierno, pondrás, innecesariamente, la temperatura más elevada, lo que desembocará en un aumento de tu factura.

4. No abuses de la calefacción:

Por la noche es preferible apagar la calefacción. Usando prendas gruesas, zapatillas calentitas y el edredón nórdico es más que suficiente para mantenerte caliente durante la noche.

5. Ventilar una vez al día:

Entre 10 y 12 minutos será suficiente para renovar el aire sin perder el calor acumulado. Es importante ventilar para eliminar las bacterias acumuladas durante la noche, reduciendo por tanto la aparición de gripe y resfriados.

6. Apagar los radiadores de los espacios que no se usen:

encender los radiadores de toda la casa implica un gasto de energía considerable, además de un incremente importante en la factura de la luz. Si hay habitaciones en las que no se está, lo más lógico es apagar dichos radiadores y mantener la puerta cerrada. Así, solo se calentarán los lugares que realmente utilizamos.

7. Bombillas de bajo consumo:

son un poco más caras pero, con un mismo nivel de iluminación, ahorran hasta un 80% de energía y duran 8 veces más, lo que al final se traduce en un ahorro de energía y dinero considerable. La media de hogares españoles utiliza 22,8 bombillas de media, según la OCU y las bombillas tradicionales se resisten a dejar paso a las de bajo consumo.

8. Compara ofertas:

Una de las mejores formas de ahorrar es comprar tarifas de luz y gas y elegir la que mejor se ajuste a tus necesidades y hábitos de consumo. Es fundamental informarse minuciosamente sobre los distintos tipos de tarifas, garantías y coberturas de cada compañía y elegir la más adecuad apara nosotros.

Según la Fundación Gas Natural Fenosa, la calefacción supone uno de los principales elementos donde se concentra un mayor potencial de ahorro en los hogares españoles, concretamente 1.190 millones de euros anuales aproximadamente.

Recuerda que si, a pesar de nuestras recomendaciones, tienes algún problema puntual para hacer frente a tu factura de la luz, puedes solicitar un préstamo rápido de forma fácil e inmediata en nuestra web.